A menudo te encontrarás con el término prótesis capilar sin saber que en realidad se trata de un tipo de prótesis capilar, o un implante hecho ad-hoc para ser aplicado en todas aquellas zonas donde nuestro cabello está ausente o es extremadamente fino.
La base sobre la que se injerta el cabello, ya sea natural o artificial, se llama membrana. Las primeras membranas de la historia son similares a las utilizadas en las pelucas, aunque no tenían las características de las actuales (transpiración, invisibilidad, usabilidad, etc.), la función era similar.
Digamos que podríamos considerar a la peluca como el verdadero antepasado de las prótesis cutáneas.
El objetivo común era el mismo, es decir, cubrir todo el cuero cabelludo pero el resultado final no es comparable, sobre todo en términos de realismo.
Con el paso del tiempo, el progreso va abriendo las puertas al desarrollo de nuevas membranas, cada vez más resistentes a factores externos y más delgadas, que encajan casi a la perfección.
Las prótesis capilares de hoy, si son instaladas por manos expertas, pasan desapercibidas incluso en un escrutinio de cerca.
La membrana del implante capilar es realmente importante, aquí es donde se implanta el cabello. Pero, ¿Qué hace que una prótesis capilar sea diferente de otra?
Son características como: la calidad, la coloración, el tipo de cabello utilizado y su propio tratamiento, las que marcan la diferencia.
La prótesis se caracteriza por tres elementos esenciales:
1. La base, una fina membrana;
2. El injerto con el que se aplica el cabello;
3. El tipo de cabello.
Es importante tener en cuenta que no es solo el aspecto de calidad lo que determina si una prótesis es mejor que otra.
Por tanto, hay que analizar tanto los materiales con los que se produjo como el tipo de cabello implantado en la membrana. Cuando se trata de cabello, es bueno conocer los más populares en uso en prótesis capilares:
1. Cabello artificial o sintético;
2. Cabello indio o remy;
3. Cabello europeo.
Cada tipo de cabello tiene sus propias características que se reflejan en la prótesis capilar. A la hora de elegir una prótesis, preste mucha atención al aspecto y tipo de cabello, cuanto más similares sean a los suyos, menor será el desprendimiento.
No es fácil elegir el primer sistema cutáneo, por eso antes de continuar con nuestro artículo será mejor arrojar luz sobre un aspecto esencial:
Ahora que eres consciente de que los sistemas capilares que encontrarás por ahí están hechos con pelo sintético, europeo o asiático, hablemos brevemente de las peculiaridades entre un tipo de cabello y otro.
Los sintéticos a veces son más baratos y están fácilmente disponibles en el mercado, sin embargo, le recomendamos que también eche un vistazo a los otros modelos antes de elegir su prótesis. Entre los tipos de cabello mencionados, hay que hacer algunas distinciones con respecto a la naturaleza del cabello en sí.
¿Sabías que el cabello indio y chino tienen algunas características en común?
No se trata solo de color o suavidad al tacto.
Detrás hay una estructura fuerte en forma de frijol, además, las hebras suelen ser onduladas.
En cambio, la estructura del cabello europeo (ruso y caucásico) difiere de los ejemplos anteriores debido a la coloración variable: las puntas son siempre más claras que la raíz. Otro aspecto a destacar es el pliegue, el tipo europeo tiene mayoritariamente un pliegue recto.
El pelo Remy o indio conquista actualmente la cima: son los injertos más habituales y se colocan a medio camino entre los cabellos asiáticos y europeos (también en cuanto a grosor).
Junto a las reflexiones que acabamos de hacer, detengámonos un momento en estos otros dos puntos: la zona sobre la que se aplicará el implante y el estilo de vida que llevamos a diario. Antes de realizar una compra, prueba a echar un vistazo a los resultados de tu investigación con lo que has aprendido, verás que elegir tu prótesis capilar ideal te será más fácil.
Las prótesis que encuentras en el mercado tienen un precio variable que se diferencia según la calidad y tipo de prótesis en sí.
Como es fácil de adivinar, cuanto más refinada sea la prótesis, mejor será el material del implante y mayor será el precio.
La longitud del cabello también influye mucho, de esto podemos deducir por qué las prótesis femeninas se encuentran entre las más caras.
Visitando nuestra tienda puedes hacerte una idea de los costes, pero en general una prótesis económica en el mercado ronda los 150 €.